Hasta ahora los únicos FleaBass eran los Modulus que él había ayudado a diseñar y que lleva varios años usando en las giras de los Red Hot Chili Peppers. Sin embargo esto ya no es así, Flea ha roto su relación con Modulus al negarse ésta a producir un proyecto bastante curioso. Según afirma el propio músico en el MySpace de la marca, su objetivo es el de poder ofrecer a los jóvenes bajistas instrumentos que merezcan la pena a precios competitivos, que suenen bien, sean bonitos y estén bien acabados y ajustados; de hecho, su lema es "Si no se tocan genial, no llegan a las tiendas. Nos encargaremos de que cada instrumento esté ajustado a la perfección".
La idea de estar dirigidos a principiantes se refuerza con el lanzamiento de la gama tanto en escala larga (34") como en escala corta (30"), más adecuada para niños. Ambas versiones tienen cuerpo de aliso, mástil de arce, diapasón de palorrosa y una única pastilla simple en una posición similar a la del StingRay. Las similitudes con el MusicMan no acaban aquí, ya que el golpeador tiene una forma parecida, aunque no es realmente un golpeador sino un saliente del cuerpo pintado de otro color. El color es otro de los signos distintivos del FleaBass: inspirado en la estética chillona de sus inicios, Flea ha ideado combinaciones bastante curiosas que reafirman el carácter juvenil del bajo.
Ambos modelos se venderán entre 400$ y 500$, un precio un tanto alto para un bajo de principiante, aunque Flea lo justifica con el trabajo de control de calidad que se hará en cada instrumento antes de ponerlo a la venta y con la inclusión de una funda y un DVD didáctico del propio músico. Esta iniciativa está enmarcada en una serie de actividades llevadas a cabo por el músico para fomentar la formación musical juvenil, como la apertura de una escuela de música para jóvenes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario